Es la obra más conocida publicada en tres volúmenes del periodista,
locutor y escritor español exilio en el Reino Unido después de la Guerra Civil
española, Arturo Barea. Es una autobiografía histórica novelada. Los libros fueron traducidos al inglés por la
mujer de barea, Ilse y publicados por primera vez en el reino unido entre 1941 y 1946. Orwell,
en su reseña de la trilogía, dijo: "Un libro excelente ... El señor Barea
es una de las adquisiciones literarias más valiosas que Inglaterra ha realizado
como resultado de la persecución fascista ". La primera edición en español fue publicada en
Argentina en 1951 (por Editorial Losada) y no fue publicada en España hasta
1978. Gabriel García Márquez lo consideró como uno de los "diez mejores
libros escritos en España después de la Guerra Civil " y "Una de las
mejores novelas escritas en español".
Exiliado en Inglaterra desde 1938, Arturo Barea se dedicó
plenamente a la literatura y al periodismo y fue donde terminó la que sería su obra magna, La
forja de un rebelde, una trilogía que figura entre las obras maestras de la
literatura universal. La primera parte, La forja, apareció el 12 de junio de
1941. Después del gran éxito de La forja, el 9 de julio de 1943, llegó a las
librerías inglesas la segunda parte, titulada La ruta. Con la publicación de La
llama el 22 de febrero de 1946, la editorial inglesa Faber & Faber concluía
la edición de la trilogía La forja de un rebelde. Este último libro afirmó el
éxito al vender cerca de 6.000 ejemplares en sólo seis meses. La
razón fue que Barea, en el relato de su vida, había descrito,
sufrido y llorado desde el 18 de julio de 1936 y los años terribles que le siguieron,
hasta su exilio en 1938.
La forja
Se desarrolla la historia de formación como
persona del autor, ya que el relato parte desde su infancia en Madrid donde el
protagonista estudia en las Escuelas Pías de San Fernando del barrio de
Lavapiés a comienzos del siglo XX, en la época en la que se madre era lavandera
de ropa militar en el río Manzanares. La novela refleja la trayectoria personal
del protagonista a lo largo de varios trabajos, desde pasa por aprendiz en
varios comercios y trabajar de mensajero sin sueldo en un banco, una oficina de
patentes, y otros oficios. Describe con lenguaje directo las crudas diferencias
de clase en la sociedad madrileña. Inaguracion de la plaza de Arturo Barea en Madrid , donde se encontraban las Escuelas Pías de San Fernando del barrio de Lavapiés |
La ruta
Se narra la experiencia del autor en la Guerra del Rif del
protectorado español de Marruecos, incluyendo anécdotas sobre personajes
militares como Francisco Franco o Millán Astray. También atestigua las
penalidades de la guerra de Marruecos, haciendo una crónica de la incompetencia
y la corrupción de los mandos militares españoles en el conflicto, y describe
los efectos que produce el desastre de Annual (fue una gravísima derrota
militar española ante los rifeños comandados por Abd el-Krim. Se produjo el 22
de julio de 1921 cerca de la localidad marroquí de Annual.) en su estado de
ánimo.
Guerra del Rif |
La llama
En la última parte, Barea narra con pesimismo la Guerra
Civil Española desde la batalla de Madrid, y describe sus desacuerdos con la
izquierda imperante al no ceder a rendirse ante el dominio militar de los
sublevados durante el desarrollo del conflicto. El protagonista, que trabaja de
enlace en las instalaciones republicanas en la Telefónica, acaba exiliándose a
Inglaterra en el año 1938.
En el conjunto de esta obra pueden diferenciarse, además de
la trama narrativa común a la novela española de posguerra, dos géneros
subsidiarios: el género bélico (con el relato de la participación española en
la guerra contra Marruecos) y el género político, con el golpe de Estado de
Miguel Primo de Rivera y los sucesivos ataques y negociaciones que se
produjeron.
En 1990 Televisión Española emitió una serie de 6 capítulos
basada en las novelas. Juan Antonio Porto adaptó el texto, y la dirigió Mario
Camus. Con un presupuesto de 14 millones
de euros, fue la serie más cara rodada hasta el momento por TVE. Se destacó en
su momento el meticuloso trabajo de recreación histórica, que incluyó una
reconstrucción de un segmento de la Gran Vía madrileña tal como era en los años
1930 y el rodaje de escenas en el norte de África. Participaron 20 000 extras.
Se estrenó el 30 de marzo de 1990 y
existe versión en DVD.