domingo, 28 de junio de 2020

Confesiones de una máscara (仮 面 の 告白)

Es la segunda novela del autor, poeta, dramaturgo, actor, modelo, director de cine, nacionalista japonés nominado al premio Novel de Literatura Yukio Mishima (seudónimo de Kimitake Hiraoka). Publicado por primera vez en 1949 tiene un fuerte contenido autobiográfico cuenta la historia de un joven homosexual que debe esconderse detrás de una máscara para encajar en la sociedad, explorando temas de identidad, presión social y militarismo en la cultura japonesa. En ese momento, al tratar de forma realista la homosexualidad atrajo una gran atención, y este trabajo hizo que Mishima se convirtiera de repente en un famoso escritor a la edad de 24 años. Está considerada su obra maestra y una de los trabajos literarios más importantes de la literatura japonesa y universal del siglo XX.


Koo-chan, el joven narrador de Confesiones de una máscara, es un alma atormentada por una sensibilidad turbadora que va creciendo con el estigma de saberse diferente a los demás. De aspecto débil y enfermizo, solitario y taciturno, de extracción menos favorecida que sus compañeros, irá descubriendo sus inclinaciones homosexuales cuando se siente atraído por Omi, un chico de fuerte constitución. Pero, esclavo de lo convencional, no puede aceptar que trasciendan sus diferencias y deseos, por lo que establece una relación con Sonoko, la hermana de su amigo Kasuno, intentando convencerse de que está enamorado de ella. Mientras asume su escaso poder para amar, irán aflorando sus fantasías y su fascinación por la belleza entremezclada con la sangre, la violencia, la muerte..., escenificado en el cuadro de Guido Reni que representa el martirio de San Sebastián.

San Sebastián de Guido Reni  y Mishima representando el cuadro

La novela depende del doloroso equilibrio entre las experiencias internas del personaje principal Kochan y las realidades del mundo real durante la Segunda Guerra Mundial. Kochan es un personaje fascinante e inusual, un homosexual en un mundo de machismo en tiempos de guerra. Pasa la novela manteniendo oculta su verdadera identidad, al igual que Mishima en sus primeros años de vida. Al igual que todos los hombres japoneses de su edad, Kochan espera ir a la guerra cuando llegue el momento, y describe su espera de una muerte segura como una "felicidad única". Se siente libre de responsabilidad hacia los demás mientras juega sádicamente con las emociones de aquellos que profesan amarlo. Fantasea con guerreros valientes y muertes heroicas y sangrientas, pero vive con miedo al servicio militar obligatorio y tiene la esperanza secreta de ser descartado por razones médicas. Exteriormente, maldice la "venganza de la realidad" sobre sus sueños, pero sabe que si se le cae la máscara, se convertirá en el clavo que sobresale, el que sera martillado como un ejemplo para los demás. Su terror ante la posibilidad de ser descubierto es vívido. En muchos sentidos, "Confesiones" es el texto clave para comprender las novelas posteriores de Mishima. En él, explora los polos de su psique, su homosexualidad y su atracción romántica / erótica por la guerra y el combate. Es un examen mordaz e inquebrantable de la oscuridad en los rincones más remotos de la mente humana.


La novela es un bildungsroman (Novela de aprendizaje) , la historia del crecimiento de un joven hasta su madurez. Sin embargo, mientras este tipo de novelas en esa época enfatizan la lucha de un niño por lograr una hombría heterosexual convencional, Mishima enfatiza los deseos homosexuales de su joven protagonista, en cuya lucha es enfrentar sus sentimientos honesta y abiertamente. La historia se cuenta desde una perspectiva en primera persona El narrador  Kochan, que es el diminutivo del nombre real del autor que es una versión más antigua y más sabia del propio protagonista, que aparentemente relata eventos pasados ​​de su propia vida. La mayor parte de la narrativa se basa en el "ahora" del protagonista, centrándose en la historia como si se desarrollara en el presente. Sin embargo, el lector tiene una visión ocasional del futuro cuando el narrador interviene para proporcionar comentarios o explicaciones.


El narrador no es invasivo, pero sería difícil para el lector ignorar una voz tan tangible. A lo largo de la historia, existe la sensación de que el narrador presenta un caso ante el lector. Su prosa sugiere que todavía está afligido por un sentimiento persistente de culpa. Hay una sensación generalizada de que necesita desesperadamente ser entendido y juzgado en el contexto correcto. comienza con los primeros recuerdos del narrador, casi todos relacionados con el sexo o la muerte. Casi muriendo a la edad de cuatro años de autointoxicación (el propio Mishima sufría de esta enfermedad crónica). Sus recuerdos suelen combinar la belleza y muerte. Estas dualidades ocurren a lo largo de la novela, al igual que las máscaras y las apariencias falsas. 

Como el título lo indica, gran parte de la historia se refiere a las formas en que una persona presenta u oculta su identidad. La verdadera forma de ser del protagonista que su cultura encontraría objetable, por lo que adopta una máscara que le otorgará un grado de aceptación. La identidad pública del protagonista, sin embargo, es una mera actuación. Carece de sustancia. Si bien el protagonista comprende los requisitos de su papel, sabe poco del personaje que interpreta. Se comporta, casi mecánicamente, como la sociedad espera, sin ver necesariamente las razones subyacentes de su comportamiento adoptado. Confesiones de una Mascara es el estudio psicológico y sexual del narrador y sus intentos fallidos de adaptarse a las normas heterosexuales de su sociedad altamente estructurada. Más allá de ser un psicodrama sobre aspectos conflictivos del mismo yo, la novela puede leerse como una variación sobre el tema de un individuo en conflicto con su sociedad.

Aunque la narrativa de la novela se desarrolla cronológicamente, el método de Mishima es enfocarse intensamente en ciertas imágenes o puntos de tiempo en lugar de proporcionar una secuencia de eventos conectada. Las personas, los incidentes y las imágenes aisladas tienden a asumir poderosas sugerencias simbólicas, por ejemplo, las imágenes de manchas de bebidas derramadas en las páginas finales de la novela se vinculan con el agua del baño de posparto del narrador en la escena de apertura de la novela y con el Descripción de su primera eyaculación onanística, que golpea su escritorio y sus libros.


Muchachas de uniforme (Mädchen in Uniform )

Es un largometraje alemán de 1931 basado en la obra de teatro “Gestern und heute” de Christa Winsloey dirigida por Leontine Sagancon con dirección artística de Carl Froelich, quien también financió la película. Winsloe escribió el guion junto a Friedrich Dammann y estuvo en el set durante la filmación. Está protagonizada por Hertha Thiele, Dorothea Wieck y Emilia Unda. Fue la primera película que claramente trataba el tema del lesbianismo en obtener un considerable éxito tanto en Europa como en Estados Unidos y la primera película en la historia del cine alemán en ser coproducida por los cineastas involucrados. La compañía berlinesa Deutsche Film -gemeinschaft fue fundada especialmente para esta película y luego se disolvió nuevamente. La película está considerada un clásico de culto internacional.

 Leontine Sagancon, Carl FroelichChrista y Winsloe

Manuela es una adolescente que es enviada a un rígido internado después de la muerte de su madre. La directora del establecimiento es una convencida de que el hambre y la disciplina afirman el carácter de las niñas, pero Manuela tiene problemas ajustándose a la rígida disciplina de la directora. Así la niña es cuidada por la maestra Elizabeth Von Bernburg, que es la profesora más joven del internado y por la que todas las niñas (incluida Manuela) suspiran enamoradas. La película fue innovadora al tener un elenco exclusivamente femenino; en su retrato comprensivo del "eros pedagógico" lésbico y el homoerotismo, que gira en torno al amor apasionado de una niña de catorce años por su maestra; y en sus acuerdos financieros cooperativos y de participación en las ganancias.


La obra de teatro de Winsloe se basaba en sus experiencias en el internado de la Emperatriz Augusta, donde se educó. Realmente existió una Manuela, que sufría cojera después de arrojarse por unas escaleras. Ella asistió al estreno de la película. La obra se estrenó previamente bajo el título Ritter Nérestan (Caballero Nérestan) en Leipzig con Hertha Thiele y Claire Harden en los papeles principales. Después de Leipzig, la obra fue producida en el escenario en Berlín con un elenco diferente. El éxito de la obra llevó a la producción de la película. El aspecto lésbico de la historia fue minimizado y representado como un enamoramiento adolescente y también se cambió el final en la obra, la joven estudiante, Manuela se suicida y el final de la película es más ambiguo.  Después de muchas pruebas de pantalla, Winsloe había insistido en que su amiga Thiele desempeñara el papel principal. La directora Sagan hubiera preferido a Gina Falckenberg, que había interpretado el papel en el escenario en Berlín, pero además de haber interpretado a Manuela en Leipzig, Thiele ya había interpretado a una joven lesbiana en una obra teatral y aunque tenía veinte años se la consideraba más capaz de retratar a una niña de catorce años (Hertha Thiele y Dorothea Wieck nacieron en el mismo año (1908), interpretan a mujeres de diferentes edades en la película.) Al repetir los papeles las actrices principales la película se pudo producir a gran velocidad y con un bajo presupuesto. En gran medida se rodó en el orfanato militar de Potsdam, ahora una escuela de formación de maestros. También se utilizó el estudio de Carl Froelich en Berlín- Tempelhof . El título original de la película era Gestern und heute ( ayer y hoy ), pero se pensó que era demasiado insípido y se cambió para aumentar las posibilidades de éxito de taquilla.


Tras su éxito en Alemania La película se distribuyó y fue un gran éxito en Rumania Japón Inglaterra, Francia y Mexico. También se distribuyó en, Estados Unidos donde se prohibió por primera vez y no fue hasta que la primera dama estadounidense Anna Eleanor Roosevelt vio la importancia de la película que se levantó la prohibición, pero se estreno una versión muy reducida. Durante la era nazi la película fue prohibida por 'decadente'. El tema lésbico probablemente pesó menos en esta prohibición que la descripción de la crueldad prusiana y la crítica de la autoridad y la disciplina. Supuestamente intentó quemar todas las impresiones existentes, pero para entonces varias se habían dispersado por todo el mundo. Sagan y muchos otros asociados con la película huyeron de Alemania poco después de la prohibición. Muchos mimbres del elenco y el equipo eran judíos, y aquellos que no pudieron escapar de Alemania murieron en los campos de concentración. "La primera vez que sabias que eran judíos fue cuando llego el fascismo y perdías a tus amigos", dijo Thiele, quien salió de Alemania en 1937. El subdirector Walter Supper se suicidó cuando se hizo evidente que su esposa judía sería arrestada. Las impresiones de la película sobrevivieron a la guerra, pero fueron fuertemente censuradas hasta la década de 1970, y no se volvió a mostrar en Alemania hasta 1977, cuando se proyectó en la televisión. En 1978, se organizaron un relanzamiento en los Estados Unidos y en 1978 salió a la venta por primera vez en VHS con el material que se pudo encontrar.  En 1994 y en 2000 se editaron nuevas versiones con material recuperado, pero incluso a esta versión les faltan algunasbreves escenas .


Muchachas de uniforme ganó el Premio del público a la perfección técnica en el Festival de cine de Venecia en 1932 y recibió el Premio japonés Kinema Junpo a la Mejor película en lengua extranjera (Tokio, 1934). En 1951 se rodó un remake en México dirigida por Alfredo B. Crevenna en 1954 en Japón como “Onna no sono” dirigida por Keisuke Kinoshita y en Francia en 1958 dirigida por Géza von Radványi , protagonizada por Romy Schneider , Lilli Palmer y Therese Giehse , en estos remakes están atenuados en contraste con el original, tanto políticamente en términos de críticas a Prusia como en la relación de los dos personajes principales.



 

miércoles, 24 de junio de 2020

El extraño que llevamos dentro (Der Fremde in uns)


Subtitulado "El origen del odio y la violencia en las personas y las sociedades" es un ensayo del escritor, psicólogo y psicoanalista alemán suizo Arno Gruen publicado por primera vez en 2001, como el resto de su obra gira entorno a los temas básicos de su pensamiento, que se refieren al desarrollo del yo basado en el concepto de autonomía de Erik Erikson ( Fue un psicoanalista germano - estadounidense y representante de la psicología del ego psicoanalítico. Es considerado un neo-freudiano. Se hizo conocido en particular a través del modelo de desarrollo psicosocial propio). Una idea central aquí es la contradicción postulada entre autonomía e identificación en el desarrollo de la identidad.


En esta obra el autor desafía la suposición popularizada por Sigmund Freud de que los humanos tenemos una tendencia innata hacia la violencia y la destrucción. Gruen arguye que en la raíz de ese mal se encuentra el odio a uno mismo, una rabia que se origina en una autotraición que comienza en la infancia, cuando la autonomía del yo se rinde a cambio del «amor» de quienes ejercen poder sobre nosotros. Amor o poder: estos son los polos opuestos de una elección que todos los niños se ven obligados a hacer, desde muy temprano en la vida, en un drama que influye de manera profunda y duradera en la formación de la personalidad. El autor rastrea este patrón de adaptación excesiva y de rebelión latente a través de diversos fenómenos sociológicos y psicológicos, especialmente en su más trágica manifestación histórica: el nazismo. Sin embargo, este proceso que nos conduce a renunciar a un verdadero yo autónomo y que nos deshumaniza impregna también nuestras sociedades contemporáneas.

Gruen describe cómo los rechazos de los padres en la primera infancia pueden conducir a una identidad poco desarrollada. El vacío interno resultante a menudo se ve compensado por la inclinación a seguir personas o ideologías fuertes, o incluso por una cosmovisión simple y polarizadora que identifica a un enemigo como la causa de todos (o al menos los más importantes) problemas. Gruen confirma este patrón básico con casos de su propia práctica, así como casos históricos. Además de los delincuentes "normales", también dirige a grandes nazis como Göring , Hess , Frank y Hitler .


La perspectiva de Gruen parte de un conflicto entre el afán de ser amado de la niñez y la sumisión al poder parental, una primera adaptación y autotraición que para Gruen conlleva un odio a uno mismo residual y un poso de rebeldía latente que puede ser el germen de diversos odios y violencias posteriores, que en algunos casos, como el de Hitler, analizado en detalle desde los anteojos de la disciplina de la psicología social desde la que trabajó el psicólogo germano, puede evolucionar y escalar hasta las cotas que de sobra conocemos si se dan las circunstancias apropiadas, como un entorno humano afectado por la necesidad de una figura autoritaria en la que delegar sus impulsos deshumanizados. Juzguemos más acertadas o menos las tesis de Gruen en lo que respecta a la influencia de la dicotomía amor poder en la infancia, es innegable que sus conclusiones han sido y están siendo más que probadas en la actualidad: “Hitler desplegaba su papel de víctima en referencia a las supuestas burlas de los judíos dirigidas a sus aspiraciones. Este rasgo de sus discursos permitió a sus oyentes identificarse con él como víctimas y deducir que tenían derecho a vengarse”. El victimismo de determinados sectores de la sociedad y sus representantes políticos ante un sistema que los reprime y que trata de negarles el derecho a sus conquistas puede verse todos los días en televisión. “Es significativo -afirma Gruen- que las autoridades estatales correspondientes siempre minimizan la violencia de la extrema derecha y la consideran «comprensible». A su violencia se le quita importancia considerándola una «pelea»”. No hay duda de que las ideas de Gruen guardan una estrecha relación con la forma en que se dan los hechos en nuestras sociedades. La propuesta del psicólogo para desactivar el odio pasa por un mayor respeto a la maternidad y a sus necesidades y una atención correcta en el periodo de la infancia para que la semilla del odio no eche raíces. 


En 2001 la obra recibió el Premio Hermanos Scholl, otorgado por  La asociación bursátil del comercio de libros alemán y la ciudad de Múnich . El Premio está dotado con 10.000 euros, se otorgará por un libro que "atestigua la independencia intelectual y es capaz de promover la libertad civil, el coraje moral, intelectual y estético, y proporcionar impulsos importantes para el sentido actual de responsabilidad".

Arno Gruen en el medio recibiendo el premio Arno Gruen